Recomiendo mucho este hotel, por los comentarios y reseñas había leído que el servicio del personal no era muy bueno con personas locales/mexicanas por lo que iba con muy poca expectativa del servicio; sin embargo, me sorprendió, TODOS son muy amables, cálidos y hospitalarios, desde recepción hasta el servicio de limpieza, cada persona del hotel nos atendió y nos recibió como si estuviéramos en casa, además de que siempre intentan asegurarse de que te sientas cómodo, en el restaurante siempre te preguntan si algo no te gusta. Soy una persona con dieta vegetariana y siempre suelo tener alimentación restringida ya que nunca ofrecen muchas opciones para mi, sin embargo, todos los días comí muy rico!! pagué todo incluido y sin duda valió la pena. Lo único que mejoraría, es que hay muchísimos niños en la alberca para adultos, siendo que en el reglamento dice que ellos deben de ir en chapoteadero acompañados de un adulto, pero a los papás les vale y meten a bebés de 1-2 años a la alberca grande. El servicio de crepas fue el único donde el personal no fue muy amable, la chica que atendía/hacía crepas, te hace caras como si estuviera ahí a la fuerza, incluso una niña menor, le pidió una crepa y se la pasó hablándole mal, lo cual se me hizo grosero siendo que es un hotel familiar y obviamente habrán muchos niños.
Fuera de eso, todo fue excelente, los felicito!
Nota a considerar: la playa no es muy linda para meterse, la arena está sucia, la marea es muy alta y las olas fuertes.