La ubicación es buena porque se encuentra al lado de la playa pero esta muy lejos del centro urbano: a media hora caminando a buen paso del centro del pueblo de Hendaya y de la estación de tren para ir a cualquier lugar cercano.
El apartamento es como en las fotos. La cama de matrimonio es bastante incómoda porque su material es de baja calidad. Las almohadas son muy malas y la estructura del canapé es de láminas de madera antigua.
El menaje de la cocina es excesivamente escaso. No hay un mantel ni tampoco servilletas, ni balletas, ni productos adecuados para limpiar la casa.
Es un inconveniente que tengas que llevarte las sábanas y las toallas. El precio que tiene el alquiler de ellas es muy caro y debería estar incluido y no pagarlo aparte.