Encantada! El personal super amable y atento. Rachel en la recepción un encanto, super educada y simpática, nos ayudó a encontrar sitios buenos para comer y su alegria te alegraba el día. Julio a la hora del buffet tambien nos ayudó mucho y tambien era muy atento. La zona estaba muy bien, estaba cerca de la estación, lo que nos permitía coger bus, tren, taxi y metro sin problema. Por la noche se veía un poco más complicada la zona pero nosotras no tuvimos ningún incidente.
Lo único, en la habitación faltaba un espejo grande o al menos un segundo espejo, un secador un poco mejor y una puerta de entrada a la habitación más gorda, ya que los ruidos a veces molestaban un poco. Por lo demás genial. Repetiria sin duda!!